La familia Couso instará a la Fiscalía General del Estado a investigar las filtraciones de Wikileaks

El periodista Carlos Hernández cree que las filtraciones 'han demostrado que teníamos razón frente a aquellos que decían que no se trataba de un crimen de guerra', en referencia a la muerte del cámara de Tele5, José Couso, en la Guerra de Irak.

El abogado de la acusación particular Enrique Santiago, señaló que con la macrofiltración de Wikileaks se ha puesto de manifiesto que “la Fiscalía General del Estado ha intentado encubrir” a los soldados que, presuntamente, asesinaron a José Couso, cámara de Tele5, en la Guerra de Irak, en la rueda de prensa ofrecida el 3 de diciembre, por la familia Couso, en la sede de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM). Asimismo, Santiago apuntó que la próxima semana la familia presentará “una denuncia por los hechos publicados ante la Fiscalía General del Estado” y “esperaremos a ver que tipo de diligencias o procedimientos abre la Fiscalía para tomar las próximas medidas”. La denuncia, explicó el abogado, recogerá “exhaustivamente lo que se ha publicado en la prensa” a partir de las filtraciones de Wikileaks. Lo que se va a solicitar es que se esclarezca “si los hechos publicados son veraces o si por el contrario”, como dicen algunos miembros de las instituciones públicas, “hay algunas inexactitudes”.

Enrique Santiago calificó de “bochornosa la actuación de las instituciones españolas” y precisó que es importante el hecho de que “hasta la fecha, nadie haya negado la veracidad de los telegramas que se han publicado” a partir de las filtraciones de Wikileaks. Concretamente, según publicó 'El País', "Cándido Conde-Pumpido informó puntualmente a la Embajada de EE UU sobre la posición que mantendría la fiscalía en el caso Couso y sus esfuerzos para que se archivara".

Javier Couso, hermano de José Couso, señaló que “nos sentimos estafados por las personas que han salido en estos papeles, desde la que era vicepresidenta Primera ministra de la Presidencia, María Teresa Fernández de la Vega, hasta el Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido Tourón”, que, a lo largo de estos años, “se han estado pidiendo que no paralizasen la investigación”. “Tenemos la sensación de que nos han engañado vilmente porque han estado negociando con los representantes de los tres soldados americanos”, apunta Javier Couso.

Asimismo, Couso apuntó que “afortunadamente, no han podido parar el caso”, pero se preguntó que pensaría su hermano si viese el comportamiento del Gobierno de su país”. Por otro lado, también reconoció sentirse “estupefacto con los representantes parlamentarios españoles, puesto que tan solo dos partidos han pedido explicaciones” respecto a lo publicado por Wikileaks. En relación con el Ejecutivo, Couso afirmó que “nadie se ha puesto en contacto con la familia”. “Nos hubiese gustado que lo hubiesen hecho con la misma celeridad con la que se han estado poniendo en contacto con la Embajada americana”, sentenció.

A la rueda de prensa también acudieron Carlos Hernández, enviado especial de Antena 3 TV en la Guerra de Irak, Olga Rodríguez, también enviada especial y testigo de lo sucedido en el Hotel Palestina, y Antonio Segura, abogado Asociación Libre de Agobados (ALA).

Por su parte, Carlos Hernández cree que las filtraciones “han demostrado que teníamos razón frente a aquellos que decían que no se trataba de un crimen de guerra”. “Se ha intentado frenar la investigación, pero el caso sigue adelante”, señaló Hernández.

Olga Rodríguez pidió, que “de una vez por todas haya una separación de poderes en este país”, porque con la información de los papeles publicados “esto queda en entredicho”.

El abogado Antonio Segura mostró su apoyo hacia cualquier iniciativa llevada a cabo por la familia Couso. Asimismo, durante su intervención se mostró en contra de “la reforma de la Ley de Jurisdicción Universal que pretende suprimir la acusación particular” y advirtió de los “peligros que esto puede conllevar”. Segura finalizó su intervención denunciando que “debemos estar vigilantes porque el ataque de los Derechos Humanos no ha terminado”.

El cámara de Tele5 José Couso fue muerto por un disparo de un carro de combate del Ejército norteamericano el 8 de abril de 2003 mientras se encontraba en la planta 14ª del Hotel Palestina grabando la entrada de las tropas estadounidenses en Bagdad.
 

Cables relacionados con esta información publicados por 'El País'.