Pedro Blasco: ‘El periodismo auténtico es el de calle, buscar la noticia debe ir en el ADN del periodista’

Tras 24 años en “El Mundo”, varios como redactor jefe de la sección de Madrid, maño como es él, Pedro Blasco emprendió numerosos proyectos, pese a que “todo son zancadillas para que te quedes en casa”. A sus 58 años, dice que sigue siendo un novato y que aprende cada día en Vozpópuli, en Telemadrid –“Madrid Despierta”, de Vicente Gil y Cristina Sanz–, en Onda Madrid –“Hoy en Madrid”, de Ely del Valle–, en Tupolicia.com y en sus colaboraciones con el padre Ángel, en Mensajeros de la Paz.

Ahora, la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) le galardona con el Premio APM al Periodista Especializado en Madrid del Año 2014, reconociendo una trayectoria de casi 40 años (“Heraldo de Aragón”, Europa Press, “Diario 16”, exdirectivo de la APM), porque “su rigor informativo y la manera sencilla de acercar la información a los ciudadanos le han convertido en un referente del mejor reporterismo de calle en Madrid”.

- ¿Dan menos espacio a la información local los grandes medios de comunicación actualmente?

Cuando llegó la crisis del sector, en muchos casos se empezó a recortar por la información local. Ahora se dedican más al ocio y al “infoentretenimiento”. Así nos olvidamos, por ejemplo, del conflicto de Coca-Cola, que es una operación de manual de cómo se puede hacer algo con tanta sinvergonzonería en este país. Y solo se ha publicado alguna información cuando ha habido una sentencia.

-¿Terreno abonado para algunos de los casi 450 nuevos medios creados por periodistas durante la crisis? Buena parte de ellos se centran en la información local.
-Creo que el futuro está en medios locales pero muy locales, no de todo Madrid. Webs en las que se muestren lo bonito y también lo feo de cada zona, que sean atractivas al ciudadano y que den un servicio. Información y servicios. Y aún así, es muy difícil porque los costos son muchos y la publicidad en estos medios tiene que ser barata y cuesta mucho obtenerla.

-Y luego está lo de sobrevivir siendo autónomo.
Este Gobierno, el anterior y el que venga no quiere que las personas de más de 50 años trabajen; porque, si no, son inexplicables los obstáculos que te ponen para ello. No te ayudan en absoluto. ¿Una persona que haya cotizado siempre la máxima cantidad cómo se va a bajar la tarifa a 200 euros? A partir de esa edad, se piensa en la jubilación. Y si provienes de una empresa en crisis y te das de alta como autónomo, rompes la cadena que permite jubilarte antes de tiempo. Son todo zancadillas para que te quedes en el paro y en tu casa. ¿La gente qué hace? O engaña al Estado, facturando a nombre de alguien cercano, o hace economía sumergida; y ello es por culpa de la falta de recursos para que una persona de 55 años o más pueda reinsertarse en el mercado laboral.

-Eso por no hablar del desfalco de experiencia que se está produciendo en los medios españoles, a golpe de prejubilación.
Las empresas están encantadas de que se vaya la gente aunque sea buena. Y eso es terrible. He visto personas que son “catedráticos” de esto del periodismo y se han tenido que ir pese a ser auténticos maestros, de los que yo querría aprender ahora con 58 años. Desde el primer día que he estado en este negocio, he podido aprender de los que saben.

- Mire a Gay Talese, que, a sus 83 años, suele decir que “siempre seré un novato”.
Yo también. Reconozco que, con 58 tacos, sigo siendo un novato. Todos los días aprendo, y todos los días me equivoco; y muchos días escribo mal. Pero, durante toda esta trayectoria, me lo he pasado muy bien y he conocido cosas que otras personas no tienen acceso a ellas. Y además, me han pagado, y me han pagado muy bien.

También he pasado por algunos momentos muy malos, como las muertes de José Luis López de Lacalle, Julio Fuentes y Julio Anguita Parrado, compañeros de la redacción que murieron por amor a la profesión.

-¿Qué particularidades tiene Madrid como plaza informativa? Cuéntenos cómo es ese tótum revolútum entre lo nacional y lo regional.
Yo les digo a mis amigos que nunca salgan en las páginas de Nacional, que es mejor salir en las de Madrid. Porque en las de Madrid la cosa es más suave: has escrito algo regular; si saltas a Nacional, es porque has hecho algo muy feo o malo. También es verdad que el periodista de la sección de Madrid quiere saltar a las páginas de Nacional.

Lo que no comparto es que, en muchos medios, la sección de Madrid ha sido considerada como la hermana chica, en la que se forma a los periodistas. Y el que era bueno pasaba a Nacional. No debe ser así, es un error. Si tienes buenos periodistas en la sección de Madrid, cuando haya un problema importante en la ciudad, te lo va a solucionar los que mejor la conocen.

-Varias elecciones, juicios por corrupción, nuevas caras en la política madrileña... ¿Debiera ser un año apasionante periodísticamente?
Ya está siendo un año muy fuerte. La irrupción de Podemos y Ciudadanos va a suponer un cambio radical en la política, también en Madrid. De momento, en cuanto a las relaciones con los medios, los que tienen que aprender mucho son los de Podemos. Deben aprender que la prensa no es un enemigo, aunque lo piensen desde el primer día. Tienen unos tics absolutamente autoritarios con la prensa. A lo mejor aprenden, pero no tiene pinta.

-Por otra parte, ¿no hablan demasiado los periodistas de política pura y dura y se olvidan de otros muchos temas que interesan al ciudadano?
Lo bueno que tiene la información local es que abarca todo lo que interesa a las personas de una ciudad: política y economía regional, pero también la vida social, la vida marginal… Y es más fácil acceder a los contactos, excepto en organismos impenetrables como la policía y Patrimonio Nacional, en el que parece que no se ha muerto Franco.

Un ejemplo: el otro día vi unos carteles en la calle de Espronceda con propaganda racista y xenófoba e hice una fotografía, que, junto a su texto, ha sido la noticia más leída durante dos días en Vozpópuli. Esto demuestra que a la gente no solo le interesa la política y la economía, sino también estas barbaridades y que se investigue quién ha puesto esos carteles para su posterior detención.

-Repasemos su trayectoria. Trabajó muchos años bajo la dirección de Pedro J. Ramírez en “Diario 16” y “El Mundo”. ¿Cómo ve el proyecto de El Español? ¿Y el desembarco de periodistas de “El Mundo” en este nuevo medio?
Es un proyecto ambicioso, con la ventaja de no tener deudas detrás, por lo que puede salir con agresividad económica. Con buenos profesionales y compañeros, que lo harán bien. Será un medio muy importante a partir de otoño.

Y mientras haya ofertas que mejoren lo que hay, los periodistas pueden optar por cambiar. Un buen periodista puede hacerlo bien en “El Mundo”, en El Español o en “El Mensajero de San Antonio”.

-Trabajó anteriormente en Europa Press. ¿Han perdido influencia las agencias de noticias ante el avance de nuevos competidores en la carrera por la primicia, que aprovechan las ventajas de lo digital y de las redes sociales? ¿Cuál es el papel de las agencias en este nuevo escenario?
Las agencias son la mejor escuela para los periodistas, el mejor sitio para trabajar. Debieran ser obligatorias para los recién licenciados.

Respecto a la pérdida de influencia, muchas de las versiones digitales se nutren de las agencias, que son la base de todo. Es un periodismo de calle y de servicio a los medios muy valioso. Van tan rápido que no se pueden quedar al canapé, aunque con esto de la crisis se haya reducido a la mínima expresión…

-En la actualidad, compagina su labor en Vozpópuli con sus colaboraciones en Telemadrid. ¿Por qué cree que es común entre los ciudadanos oír aquello de que deben desaparecer las televisiones autonómicas?
Creo que vamos a un modelo, porque así lo han decidido los políticos, en el que las televisiones autonómicas tengan menos peso. Por otra parte, tengo que decir que yo en Telemadrid siempre he dicho lo que me ha dado la gana.

-En general, ¿están los periodistas demasiado cerca del poder?
Yo creo que sí. En ocasiones, nos hacemos amigos y eso rompe la objetividad. Da corte publicar algo. A mí me ha pasado en alguna ocasión. Produce conflictos personales. Tengo un caso muy reciente: publiqué una información sobre alguien que conozco hace 25 años, se ha enfadado conmigo y ha dejado de hablarme.

-¿Hay más amiguismo entre políticos y periodistas en la información local?
Creo que no. No hay más que en otras secciones o medios. Yo admiro a los que son realmente independientes. Es una de las cosas que admiro de Pedro J. Ramírez: si el protagonista de una historia es amigo o conocido suyo, ello nunca le impidió publicarla. Y digo lo mismo de Casimiro García-Abadillo y de mi actual jefe, Jesús Cacho.

-CTXT ha pedido el voto para Manuela Carmena en la alcaldía de Madrid y para Ángel Gabilondo en la misma comunidad, y ha instado a los demás medios a que aclaren a sus lectores a qué candidatos van a apoyar. ¿Qué le parece esta decisión?
Está muy bien, cada uno puede hacer lo que quiera. Creo que no debieran hacerlo, yo no lo haría nunca; pero estamos en una sociedad tan libre que a mí me encanta que cada uno haga lo que quiera.

-“La verdad está en el viaje, no en el puerto. No hay más verdad que la búsqueda de la verdad”, dijo el escritor y periodista recientemente fallecido Eduardo Galeano. ¿Existe la verdad o es un ideal que buscan los buenos periodistas?
La verdad es lo que ves y lo que averiguas, y la impresión que recibes, una vez que has reflexionado y analizado si es cierto.

-Cuando se acabe la crisis económica, ¿se acabará la crisis del sector periodístico?
Como dicen los sabios de esto, nunca llegará a ser lo mismo. En unos medios se han producido ajustes de sueldos; en otros, los sueldos son directamente bajísimos. Ojalá ganaran más los periodistas. De esto tendrá que salir un nuevo sistema. La publicidad nunca va a ser lo mismo. Pese a ello, creo que nos estabilizaremos, pero no sé cuándo.

Lo mejor es la explosión de los nuevos medios, como hablábamos antes. Cuantos más medios hay, más libertad para contar las cosas. Pero, hasta dentro de muchos años, el empleo que se creará no será igual.

- ¿Qué significa para usted este Premio APM al Periodista Especializado en Madrid del Año?
Es la culminación a una trayectoria profesional de casi 40 años, y una ilusión tremenda porque es un premio otorgado por colegas. Tiene truco: me lo han dado algunos compañeros de Junta Directiva de la APM, no debí dejar mal recuerdo en ellos. Y me hace más ilusión aún que me lo concedan por mi trabajo de calle.

-Decía Tom Wolfe en una entrevista en “La Vanguardia” que “los periódicos pierden dinero porque no pisan la calle. Se quedan en la mesa, calentitos y haciendo de buenos chicos y cumpliendo órdenes”.
Hay una tendencia, no solo de las empresas, sino de los propios periodistas, a quedarse en sus mesas porque en invierno hace mucho frío fuera y mucho calor en verano. El periodismo auténtico es el de calle, buscar la noticia debe ir en el ADN del periodista. Hay personas que cubren los sucesos desde la redacción. Lo que ocurre es que ha cambiado todo tanto que ahora también se trabaja muy bien con el teléfono móvil y se pueden hacer maravillas.

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