La ONG ha registrado 40 agresiones, 23 detenciones, dos intentos de secuestro, cinco heridos graves y cuatro ataques físicos a medios.
La semana del 11 al 17 de julio, varios periodistas fueron atacados deliberadamente mientras los oficiales de la policía y los miembros de las fuerzas de seguridad de la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK), uno de los dos principales partidos que forman el Gobierno del Kurdistán iraquí, observaban impasibles, según denuncia Reporteros sin Fronteras (RsF) en una nota.
Anteriormente, el 13 de abril, varios hombres armados vestidos de civiles atacaron a los periodistas que cubrían el incendio de un edificio en uno de los centros comerciales más importantes de la ciudad de Erbil. La policía no hizo ningún intento para ayudar a los periodistas, según la misma nota.
Farman Muhammad, coordinador de NTR en Erbil, contó a Reporteros Sin Fronteras que el equipo formado por un reportero y un cámara que enviaron para cubrir el incendio fue atacado y golpeado violentamente, hasta el punto de romperle una mano al fotógrafo. Estas agresiones fueron cometidas por los guardias y empleados del centro comercial, según la nota de RsF. Muhammad añadió que "había decenas de policías” y los dos periodistas “les pidieron que intervinieran, pero no hicieron nada, llegando a destruir la cinta donde se grabó el incidente".
El 15 de julio, cuando se reanudaron las manifestaciones antigubernamentales en Sulaymaniyah, las fuerzas de seguridad del PUK atacaron a los periodistas que fueron a cubrir las protestas. Hawzhin Gharib, coordinador del periódico Chatr, contaba: "Yo estaba con amigos en plaza de Saray para cubrir la protesta. De repente, un oficial nos pidió que le siguiéramos. No nos dio otra opción. Salimos de la plaza y nos condujeron a la parte trasera de un edificio. Una vez que estuvimos al otro lado, una docena de personas empezaron a golpearnos sólo porque éramos periodistas".
La nota de RsF señala que, desde mediados de febrero hasta mediados de mayo, durante el apogeo de las protestas prodemocráticas en la región del Kurdistán, la ONG ha registrado un total de: 40 agresiones a periodistas, 23 detenciones breves, dos intentos de secuestro, cinco casos de periodistas heridos graves, tres procesos judiciales y cuatro ataques físicos a medios de comunicación (Hawlati, NRT, KNN y Payam TV).
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