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Pedro J. Ramírez, director de El Español: ‘No hace falta papel para cumplir adecuadamente las funciones del periodismo’

07/10/2015

11:38

Escrito por: Xose Martín

Pedro J. Ramírez, director de El Español. Foto: Miguel Ángel Benedicto / APM

Hoy, 7 de octubre, y solo para suscriptores, se pone en marcha “El Español”, el nuevo proyecto periodístico de Pedro J. Ramírez, su director y uno de sus fundadores. El digital, editado por Nohacefaltapapel S.L. y que nace con la promesa de reinventar el periodismo, estará en abierto para el público en general el 14 de octubre.

Antes de su lanzamiento, el medio dirigido por el que fuera director de “El Mundo” y de “Diario 16”, ya ha conseguido varios hitos en la prensa digital española al lograr el respaldo de más de 10.000 suscriptores y llegar a recaudar más de 3,5 millones de euros aportados por 5.624 accionistas a través de una campaña de micromecenazgo.

- ¿Qué le hizo dar el paso para crear El Español?

Tampoco sirvo para otra cosa. Siempre he sido nada más y nada menos que un periodista. No tenía pensado dirigir otro periódico después de dirigir veinticinco años “El Mundo”, pero a mí me gusta irme voluntariamente de los sitios, no que me echen. Por una parte, era para que no se salgan con la suya los que quieren acallar mi voz, y por otra parte por aprovechar una oportunidad como la que existe gracias al desarrollo de los dispositivos móviles para distribuir contenidos informativos de una manera más eficiente y, en cierto modo, reinventar lo que es un periódico.

- ¿Qué es El Español?

Va a marcar un hito en la medida en que es el proyecto nativo más ambicioso que ha surgido en la prensa española y, probablemente, europea.

- ¿Ambicioso en cuánto a qué?

En todos los sentidos: desde el punto de vista de los recursos, del número de periodistas y del perímetro del proyecto; es decir, de los distintos productos que vamos a ofrecer en los diferentes soportes.

- El octubre de 1989 fundó “El Mundo”, 26 años después lanza una nueva cabecera ¿Afronta esta etapa con la misma ilusión?

Estoy pasando unos meses muy intensos llenos de felicidad, pero también de contrariedades. La tecnología es siempre muy complicada. Se avanzan dos pasos y se retrocede uno. Hay días en los que, incluso, solo se retrocede [bromea]. En conjunto, al final las cosas van saliendo adelante y está siendo un gran estímulo el que tengamos tanto apoyo social y que vayamos a superar los 10.000 suscriptores antes de nacer.

Pedro J. Ramírez, durante la entrevista. Foto: M.Á. Benedicto / APM

- Además de lo obvio, ¿qué diferencias y similitudes hay entre fundar un medio tradicional como “El Mundo” y ahora un digital como El Español?

La gran diferencia está en el desarrollo de la tecnología, que simplifica mucho el proceso industrial y también obliga a establecer un nuevo modelo de negocio. También es verdad que hace veintiséis años cuando nacimos, los hábitos democráticos estaban menos arraigados en la sociedad española y había un Gobierno gravemente implicado, no ya en casos de corrupción, sino en algo tan terrible como era el crimen de Estado.

En cuanto a similitudes, los valores que defendemos [en El Español] son los mismos que inspiraron el nacimiento de “El Mundo”. El periodismo crítico siempre nace como un elemento de contrapoder, es decir, como un factor crítico para ayudar a la sociedad y defender a los ciudadanos frente a los poderosos.

- ¿Qué no pudo hacer en “El Mundo” que sí va a realizar ahora?

Desarrollar mucho más intensivamente las oportunidades de los soportes digitales sin la rémora de las ediciones impresas. Sostenemos que no hace falta papel para cumplir adecuadamente las funciones del periodismo.

- Dice que El Español será independiente y resistirá las presiones de cualquier poder. ¿El Mundo no lo era?

“El Mundo” fue muy independiente mientras fue rentable. La doble crisis económica, tanto la general como la específica del sector, situó a todos los medios tradicionales en una situación difícil. A partir de ese momento, todos los medios fueron mucho más susceptibles a las presiones del poder político y económico y se introdujeron elementos de censura y autocensura en todas las redacciones. Intentaron ponernos de rodillas a los periodistas y ahora ha llegado la hora de ponernos de pie.

- ¿Algún ejemplo de esas presiones que comenta?

Todo el mundo sabe lo que pasó en “El Mundo”, lo que pasó y sigue pasando en “El País” y lo que pasa en buena parte de los medios españoles. En cada medio importante hay uno o varios comisarios políticos, a veces dentro de la redacción y a veces fuera, que ejercen de interlocutores del poder político y económico vinculado al gobierno.

- ¿Ocurre solo en la prensa en papel?

En los medios que han perdido la independencia como consecuencia de haber perdido la rentabilidad.

El director de El Español. Foto: Miguel Ángel Benedicto / APM

- ¿Qué línea editorial y en qué posición ideológica se sitúa El Español?

El Español será un periódico que estará, al mismo tiempo, contra la revolución y contra el inmovilismo y será un periódico regeneracionista, que defenderá cambios radicales en las reglas del juego para mejorar la calidad del sistema democrático.

- ¿Por qué eligieron esta cabecera?

Por tres razones. Primero porque queríamos rendir homenaje al buen periodismo político y cultural del siglo XIX y el primer tercio del siglo XX. Queríamos sentirnos continuadores y depositarios de lo que en el periodismo representaron grandes nombres como “Blanco White”, Larra, Luis Bonafoux, Antonio Maura, Ortega y Gasset o Azaña. En segundo lugar, porque era un manera muy nítida de posicionarnos en el debate constitucional abierto en España y, en tercer lugar, y casi diría sobre todo, pensando que sería una gran ventaja para nuestro desarrollo internacional el llamarnos como una de las tres grandes lenguas que se habla en la Tierra.

- ¿Qué va a hacer El Español para devolver la dignidad y trascendencia al periodismo, como afirma usted?

Vamos a intentar fortalecer la independencia y la pluralidad de la prensa con nuestra propia aportación y, también, vamos a abrir nuevos caminos desde el punto de vista de los formatos nativos digitales. En concreto, nuestra edición para suscriptores va a suponer una reinvención del periódico.

Es un periódico, no una web. Un periódico que tiene navegación vertical con portada múltiple y navegación horizontal en la que cada historia es el equivalente a una página. Esto es reinventar el periódico. Aquí hay valor añadido. La gente entiende que es lógico cobrar por un producto como este. Con el diseño nos ha ayudado mucho Audacity Partners, de Alfredo Triviño.

- En cuanto a los contenidos, ¿Qué tipo de periodismo verá el lector en El Español?

Sobre todo, periodismo de investigación y de explicación.

- ¿Qué secciones componen el diario?

Más que secciones, son áreas informativas. Tenemos un área de actualidad, que llamamos “Enfoques”; un área de economía e innovación, que se llama “Ecoinn”; ciencia, que se llama “Prodigios”; el deporte estará en “Podium”; cultura, que se llama “Miradas”, y corazón, que se llama “Jaleos”.

- ¿Usará nuevas narrativas en el periódico? ¿Cuáles?

Desde luego. Tenemos un departamento de datos muy potente, que dirige Antonio Delgado. Además, tenemos en el equipo como jefe de Ilustración a Javier Muñoz, un extraordinario ilustrador, que además está trabajando junto con colaboradores suyos con la ilustración en movimiento.

- ¿Cuenta con corresponsalías o delegaciones?

Vamos a tener corresponsales estables en los sitios más importantes y colaboradores en el resto. Es un despliegue que todavía está un poco a medias.

- ¿Pero hay alguno ya concreto?

Tenemos a Juan Sanhermelando en Bruselas, a un par de personas en Barcelona y estamos completando el despliegue con colaboradores y ya veremos si con algún corresponsal fijo más.

- Además de por usted como director, ¿quiénes integran el staff de El Español?

La parte principal del staff también la forman el vicedirector, que es Fernando Baeta; Esteban Urreiztieta, Ana Romero y María Peral, como adjuntos al director; dos subdirectores que son María Ramírez y Eduardo Suarez; el jefe de Opinión, que es Vicente Ferrer, y el jefe de Ilustración, que es Javier Muñoz.

El director de El Español muestra la app del diario. Foto: M. Á. Benedicto / APM

- ¿Y cuántos periodistas forman la redacción? ¿Contará con firmas?

Somos en torno a 71 o 72 periodistas. Sí tendremos columnistas. Estamos formando el elenco. Ya se ha anunciado la incorporación como colaborador de Montero Glez.

- ¿Cuánto tiene previsto gastar el primer año en sueldos?

Lo previsto para toda la compañía me parece que son cinco millones de euros, sin contar las cotizaciones sociales.

- Se dice sobre los sueldos -y por parte de gente que parece conocer el asunto- que hay blindajes de hasta 500.000 euros… ¿Es cierto?

Ya me gustaría conocer a alguno. No es verdad.

- ¿Cómo va a luchar El Español frente a la cultura del “todo gratis” en internet?

¿Cómo luchó Spotify frente a la cultura del todo gratis? ¿Cómo luchó Netflix? ¿Cómo luchó Amazon con el libro electrónico? No me preocupa nada de eso si ya tenemos más de 10.000 suscriptores antes de empezar.

¿Cambiará el coste de la suscripción tras el lanzamiento?

Sí. Ahora estamos captando suscriptores con un descuento, pero el coste anual va a ser de 120 euros y de 10,99 euros la cuota mensual.

- Además de los pagos por suscripciones, ¿cómo será el modelo de negocio?

Alrededor del 80% de los ingresos llegarán vía publicidad, luego irá aumentando el porcentaje de suscriptores a medida que vayamos captando más.

- ¿Y qué previsión de ingresos por cada uno tiene para el primer año?

Me parece que el presupuesto de publicidad el primer año ronda los cuatro millones de euros. Respecto al presupuesto de suscripciones, contamos con tener 20.000 suscriptores antes de finalizar el primer año.

- Respecto al plan de negocio, ¿en qué año espera llegar al equilibro?

O al final del segundo año o durante el tercer año.

- ¿Cuál es la inversión inicial con la que nace El Español?

El capital más reservas de El Español son 18 millones de euros, pero nuestro plan de negocio necesita mucho menos. Prevemos unas pérdidas de unos tres millones el primer año y nos estamos gastando unos dos millones en el lanzamiento. O sea que con mucho menos dinero, podíamos haber lanzado el proyecto. Hemos captado mucho más capital del que necesitábamos porque queríamos transmitir a todos los protagonistas, tanto el mundo político, como financiero y a la propia profesión, de que esto no es una aventura de a ver cómo nos va. Hemos venido para quedarnos.

- ¿Cuánto de esa cantidad ha aportado usted?

Inicialmente, puse lo que me dejó Montoro de mi indemnización en “El Mundo”, que fueron cinco millones y medio de euros. Luego rasqué un poco más de la hucha. Al final, personalmente y algún familiar allegado tenemos siete millones del capital. Después, con algunos fundadores y “familiar friends” podemos sumar hasta 10 millones de euros.

- El Español cuenta con 5.624 accionistas. ¿Cuál es el reparto accionarial?

Luego está el “crowdfunding”, que aportó 3,5 millones de euros, y cinco o seis grupos, que ya son conocidos, que tienen un millón o algo menos cada uno.

- ¿A qué grupos se refiere?

La Universidad Camilo José Cela, Spainmedia Magazines, el grupo hotelero Lopesan y algún industrial canario, así como algunos amigos y empresarios de cierto relieve.

Pedro J. Ramírez. Foto: M. Á. Benedicto / APM

- ¿Y qué porcentaje tendría usted? ¿Quién tiene la parte mayoritaria?

El control está supergarantizado. Los fundadores controlamos aproximadamente, sin contar el “crowdfunding”, unos 10 millones de euros. Sumándolo, controlamos prácticamente 14, de 18 millones.

- Una de estas funcionalidades que incorpora El Español en sus noticias es el “botón del accionista”, para valorar las informaciones. ¿Cómo es su funcionamiento?

Es una funcionalidad que estará en todas las historias y que va a permitir que accionistas y suscriptores valoren en tiempo real, del 1 al 5, la calidad el interés de las historias, para que nosotros sepamos que es lo que están opinando de lo que estamos haciendo.

- ¿No podría llegar a suponer una forma de censura o autocensura para los redactores?

No. Igual que tienes la información del tráfico que genera cada historia, vamos a tener también la información sobre lo que opinan nuestros suscriptores y accionistas.

- Valora y hace hincapié en la participación de los lectores y suscriptores. ¿Hasta qué punto va a poder participar el lector en El Español?

Queremos crear una comunidad de suscriptores implicados en el proyecto. Han intervenido en ayudarnos a definir la línea editorial, a perfilar nuestro código ético y, como digo, lo van a hacer también en la valoración de las noticias. El “hagámoslo juntos” es mucho más que un eslogan.

- El Español nace con “la promesa de un nuevo periodismo”… ¿Qué le ocurre al actual?

La crisis económica nos ha golpeado muy fuerte a la profesión. El poder se ha aprovechado para reducir el peso del periodismo libre y crítico en la sociedad. Los nuevos soportes van a permitir recuperarlo, tanto en términos de independencia, como en términos de mejora de la calidad de los contenidos. Ha llegado el momento en que cada día se contrate a más periodistas, en vez de que cada día se despida a más periodistas, pero los medios tradicionales tendrán que hacer su reconversión.

- ¿Cómo vivió los distintos ERE de “El Mundo”?

Con gran disgusto y con gran preocupación al ver que se optaba por un camino que yo consideraba equivocado. Mi planteamiento siempre era aceleremos el desarrollo digital aún arriesgando que la transición sea más difícil y que la caída la edición impresa pueda acelerarse, pero apostemos por contenidos y no tratemos de hacer el ajuste prescindiendo de los periodistas.

- O sea que se opuso…

Era el director y miembro del Consejo de Administración, pero había un accionista que tenía ya casi el 100% del capital. Evidentemente, se hizo lo que decidió el accionista.

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