Reporteros sin Fronteras exige que no haya más expulsiones ni retirada de acreditaciones a periodistas extranjeros en Marruecos
Reporteros sin Fronteras condena firmemente el bloqueo al acceso a la información que padecen los periodistas extranjeros y el encarnizamiento del que son víctimas los corresponsales españoles. La organización llama a las autoridades de Rabat a poner fin a la censura sobre los acontecimientos en el campamento de El Aaiún. En un contexto regional tenso, el Reino debe enfrentar sus responsabilidades y dejar que los periodistas realicen su trabajo.
El Ministerio de Comunicación marroquí retiró la acreditación al corresponsal del diario "ABC" y al de Radio Nacional, Luis de Vega, por “prácticas de animosidad y falsificación de los hechos”, en la cobertura de la crisis en el Sáhara. Al periodista de "ABC", corresponsal desde hace nueve años en el Reino, se le suspendió su acreditación sin ninguna advertencia por parte de las autoridades responsables.
Firmado por Marruecos el 19 de enero de 1977 y ratificado el 3 de mayo de 1979, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos dispone que toda persona objeto de una acusación sea informada previamente y juzgada según las reglas de un proceso equitativo, especialmente en lo que concierne a la igualdad de derecho a la defensa.
En este caso, ninguna autoridad judicial fue requerida para que fueran verificados los hechos alegados contra Luis de Vega. Lamentamos una avalancha de decisiones administrativas que no van sino en el sentido de un endurecimiento de las relaciones entre Marruecos y España. Otros tres periodistas de la cadena española SER, Angels Barceló, directora del programa Hora 25, así como el periodista Nicolás Castellano y su colaborador Angel Cabrera, fueron expulsados por la fuerza el 12 de noviembre de 2010, tras haber logrado visitar El Aaiún el 11 de noviembre de 2010.
Ese mismo día también se impidió la entrada a una periodista francesa y a dos representantes del diario "La Vanguardia" y de Catalunya Radio., así como a un fotógrafo de la agencia Associated Press. Al aterrizar en Casablanca, personal de Royal Air Maroc, les informó que su vuelo había sido anulado. Tan solo una periodista de Le Monde pudo llegar a El Aaiún gracias a la intervención de la Embajada de Francia.
La mañana del 8 de noviembre el corresponsal del periódico de los Emiratos Árabes, "The National", John Thorn, y un delegado marroquí de la ONG Human Rights Watch, fueron atacados por la policía. Tras un breve control de identidad, este último fue tirado al suelo, insultado y golpeado con palos durante media hora. Cuando les ordenaron que se fueran, supieron por fuentes policiacas que habían sido confundidos con periodistas españoles.
Fuente: Reporteros sin Fronteras
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