Nemesio Rodríguez: 'La desinformación ofrece a los medios la oportunidad de presentarse como alternativa a las falsedades que circulan por las redes'

“Aunque parezca paradójico, la desinformación está teniendo un aspecto positivo en el periodismo, ya que ha obligado a periodistas y medios a intensificar la comprobación de los hechos”, así lo ha asegurado el presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), Nemesio Rodríguez,  en la jornada sobre “La eclosión de las noticias falsas: cómo ganar la batalla a la desinformación”, que esta mañana se ha celebrado en la sede de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), organizada por la Federación con el patrocinio de Repsol.

De izq. a dcha.: Raphael Minder, Lorena García, Alba Precedo, José Cepeda, M.ª Luz Peinado y David Ferrero. Foto: FAPE

Rodríguez, que se ha encargado de presentar el acto, ha señalado también que la desinformación ofrece a los medios la oportunidad de presentarse como alternativa creíble a las falsedades que circulan por las redes, sobre todo ahora que se están implantando los modelos de pago, unos modelos que, en su opinión, solo tendrán éxito si apuestan por el periodismo de calidad. “Tampoco tengo dudas de que sin buenos equipos de periodistas, dignamente remunerados, los editores jamás podrán hacer el periodismo de calidad que necesitan para convencer a los usuarios de que hay que pagarlo”, dijo.

Para el presidente de la FAPE, el auge de la desinformación responde a cuatro factores fundamentales, el primero de los cuales es la pérdida por parte de los medios de la exclusividad que tenían antes como intermediadores entre la información y los ciudadanos.

Otro factor es la facilidad de difusión que las mentiras, los bulos y los rumores han encontrado en las redes sociales. “Siempre decimos que la difusión de noticias falsas no es nueva, pero lo que sí es nuevo es el enorme e inmediato alcance que adquieren hoy en día”, destacó.

Rodríguez ha calificado de “asombrosa” la inclinación de las personas a creerse las mentiras, aunque sean desmentidas con argumentos sólidos y fiables, lo que supone un claro indicio de la pérdida de confianza de los ciudadanos en las fuentes tradicionales. De hecho, ha dicho, “los desmentidos pierden normalmente la batalla contra la mentira, entre otras razones porque siempre hay quien está dispuesto a creer la falsedad si ésta coincide con sus emociones, sus prejuicios o su ideología o con las amenazas que les preocupan”.

El presidente de la FAPE también hizo referencia a la responsabilidad de las grandes plataformas tecnológicas en la difusión de las mentiras, y se ha preguntado si, aunque ahora están tomando medidas para frenar este fenómeno, éstas son suficientes o pueden hacer más.

Como tercer factor favorecedor de las noticias falsas, Nemesio Rodríguez habló de la utilización creciente de las estrategias de desinformación, aprovechándose de las redes, por parte de los políticos,  y de los eufemismos que utilizan para tratar de disfrazar la verdad manipulando las palabras y los hechos: Cospedal definiendo el finiquito de Bárcenas como ‘indemnización en diferido, en forma de simulación’; Zapatero hablando de ‘desaceleración transitoria’ para no mencionar la palabra crisis; la tasa de medicamentos que el Gobierno catalán bautizó como ‘ticket moderador’, y tantos otros, recordó.

El cuarto elemento que citó, y que para los periodistas es el más importante, es el abandono de la disciplina de la verificación y del contraste de las noticias con fuentes fiables. “Esta era una disciplina que colocó históricamente los cimientos de la credibilidad y del prestigio de los periodistas y de los medios”, añadió.

Tras la presentación de la Jornada, Nemesio Rodríguez dio paso a la primera de las dos mesas de debate, que bajo el título “Análisis del fenómeno global de la proliferación de bulos y noticias falsas. Situación en España”, ha moderado Lorena García, directora y presentadora de las “Noticias de la Mañana” de Antena 3.

Al respecto, Alba Precedo, de Infolibre, se centró en el papel que juega Instagram, “ideal para las fakes porque las imágenes son grandes portadoras de desinformación y es muy difícil descubrir cuáles son falsas”, y en WhatsApp, “otro foco de desinformación donde se comparten bulos”. ¿La razón? Ambas redes “no están sometidas a controles tan férreos como los que tiene, por ejemplo, Facebok”.

Raphael Minder, corresponsal de New York Times en España, contrastado el papel que el poder político debería representar en la lucha contra la desinformación y el que realmente ejecuta. En los últimos dos años se ha doblado el número de gobiernos que han hecho  campañas con noticias falsas, ha asegurado. “Es muy difícil controlar algo cuando no sabemos si la policía es más ladrona que los propios ladrones”.

Minder también ha planteado si las noticias falsa son realmente un problema. “Dentro del gremio de los periodistas y los políticos las vemos como tal, pero si hablamos con la gente joven no las perciben así”, dijo.

Desde el punto de vista político, el senador y miembro del Consejo de Europa, José Cepeda, aseguró que en el Consejo les preocupa mucho la desinformación, “porque no podemos permitir que los ciudadanos se sumen en la ignorancia. Es básica en nuestra sociedad una información veraz, objetiva y contrastada, porque sin ella los ciudadanos no tendrán criterio a la hora de votar”.

La editora jefe de Verne, M.ª Luz Peinado ha recordado que hace mucho tiempo que los medios de comunicación han perdido el monopolio de la información. “Se han creado muchos canales alternativos, como las redes sociales, que se escapan a nuestro control”. Peinado también ha señalado que el mayor reto para la lucha contra la desinformación está en WhatsApp, “porque es muy difícil rastrear en una red con una penetración tan brutal”, lo que la ha convertido en la vía ideal para que se muevan los bulos.

En esta primera mesa redonda ha participado, además, David Ferrero, portavoz de Vost Madrid, que ha insistido en el alto coste que pueden acarrear las noticias falsas, “en algunos casos vidas humanas, como ya ha ocurrido en La India y México”. Por eso, ha dicho, “tenemos que dar a ese 85% de la población que está preocupada por la desinformación los medios para que puedan distinguir una noticia verdadera de una que no lo es”.

El segundo y último debate de la Jornada se ha planteado bajo el título “la batalla contra la desinformación, ¿qué medidas están adoptando las plataformas tecnológicas, los medios de comunicación y los periodistas?, y Jon Ariztimuño, director de informativos  de Radio Televisión de Madrid, ejerció como moderador.

De izq. a dcha.: Antonio Vargas, Olga Lambea, Clara Jiménez, Nemesio Rodríguez, César González y Jon Ariztimuño. Foto: FAPE

Entre los ponentes, Olga Lambea, periodista de RTVE, se mostró preocupada por los políticos que se dirigen a los ciudadanos a través de las redes sociales, sin pasar por el filtro de los periodistas, y por los que denominan fake news a las noticias que no les gustan “poniendo en tela de juicio la credibilidad del medio que las publica”. Respecto a RTVE, destacó que son muy estrictos a la hora de considerar que las redes sociales no son fuentes de información.

Antonio Vargas, mánager de Relaciones Institucionales de Google, puso el reto, con respecto a la desinformación, en encontrar un equilibrio ante el nuevo ámbito digital. “Hay que garantizar que las noticias sean verdaderas, pero también algunos derechos fundamentales como el derecho a la libertad de expresión o a la información”.

Vargas informó, además, de que en Google, el año pasado, cancelaron 1.700 millones de anuncios que eran fraudulentos o engañosos, “con lo que hemos logrado que se cierren un montón de páginas web sin necesidad de orden judicial”.

Desde Maldita.es ha participado su cofundadora, Clara Jiménez, quien apostó por la alfabetización mediática y digital porque “todos somos conscientes de que la vida online es ya la vida real que llevamos como ciudadanos”. Respecto a los periodistas, dijo que “tenemos que tratar de trabajar con las grandes plataformas, pero también hay que exigirles que sean más transparentes y que den más datos”.

En la misma línea, César González, director de informativos de La Sexta, aseguró que los medios de comunicación deben empezar a exigir a las grande plataformas que controlen “las autopistas por las que van las noticias falsas, pero que pongan medidas de verdad” y que, en caso de no cumplir esa exigencia, se las sancione.

González habló sobre el cambio que ha vivido la información porque, “cuando el espectador empieza a compartir y a recomendar, se convierte en un pequeño medio de comunicación y lo hace sin el conocimiento ni la deontología que se supone que tienen que tener los medios”, concluye la nota.