Según la nota emitida el 21 de abril por el sindicato CC OO, las consecuencias de la actual crisis económica han agudizado la permanente situación de precariedad laboral y profesional de los medios de comunicación. Hemos pasado del trabajo sin remunerar (becarios) y de la temporalidad y los salarios más próximos al SMI (salario mínimo interprofesional) que a los 1.000 euros, a los despidos masivos y a los cierres de empresas.
Los trabajadores de los medios de comunicación estamos padeciendo el recrudecimiento de la ya permanente precarización de nuestras condiciones laborales, que de forma unilateral y sin buscar soluciones dialogadas están acometiendo las empresas, dice la nota. Los expedientes de regulación de empleo, los despidos colectivos y los cierres de empresa por mala gestión, junto a la paralización de negociaciones colectivas o la amortización de puestos de trabajo mediante bajas incentivadas y prejubilaciones son la triste realidad cotidiana.
La expansión económica y corporativa desarrollada por los grupos mediáticos en los últimos años no ha previsto poder afrontar periodos de crisis como el actual, al no invertir los cuantiosos beneficios obtenidos en reforzar las capacidades productivas, denuncia CC OO. Para muchos medios de comunicación, la crisis sirve de pretexto para acometer ajustes y recortes laborales, mientras se agita el fantasma del miedo generado por la situación de inseguridad laboral actual.
Al mismo tiempo –prosigue la nota de prensa- nos encontramos en pleno proceso de reconversión sectorial digital que abarca la televisión, la radio y la prensa escrita. Este proceso debiera ser afrontado desde planteamientos de progreso, que permitieran cumplir con la función de servicio de los medios, ampliando su alcance y acceso social. Sin embargo, se está abordando desde la ambigüedad y desde recetas tendentes a cuestionar derechos laborales y profesionales, además de poner en duda el mantenimiento del actual nivel de empleo, que ya ha sido ajustado al máximo.
La información es un ámbito crucial y estructural en una sociedad democrática, y a pesar de eso, está sometida a una permanente precariedad laboral y desconsideración profesional. La actual crisis ha agudizado esta situación, por lo que no es posible esperar una solución, si no es a través de nuestra intervención, desde la firmeza, responsabilidad y rigor acreditados y desde la mayor unidad de las organizaciones representativas de los medios de comunicación.
En mitad de una espiral de desestructuración laboral y profesional de los medios, que no parece que vaya a remitir, sino todo lo contrario, la continua pérdida de empleos y de derechos laborales y profesionales auspiciada por la crisis requiere que nos movilicemos para denunciar esta situación y para promover que se adopten medidas que eviten un deterioro irreversible en la viabilidad de los medios y en su calidad informativa.
El sector de medios de comunicación ha de contribuir a la defensa de su empleo y, al mismo tiempo, denunciar a los responsables de esta situación y proponer que se adopten medidas que garanticen el empleo, la calidad y la pluralidad imprescindibles, entre las que estarían:
- Paralización de todos los procesos de regulación de empleo que no acrediten condiciones de acuerdo entre la dirección y la representación sindical de las empresas.
- Intervención exahustiva de oficio de las instancias de control administrativo y laboral (Inspección de Trabajo, Agencia Tributaria, Tesorería General del INSS) sobre las situaciones de irregularidad laboral y fiscal, que eviten situaciones de precariedad y de fraude que condicionen la viabilidad de las empresas.
- Promoción de la Mesa sobre la situación de los medios, compuesta por el Gobierno y por los agentes representativos (sindicales, profesionales y empresariales), que aborde la necesidad de adoptar medidas públicas que refuercen las condiciones necesarias para la viabilidad de los medios.
- La necesidad de avanzar y consolidar, como indicamos en nuestras propuestas para la nueva Ley General Audiovisual, un modelo de radio, televisión, y nuevos servicios de comunicación, que cumpla con sus funciones de servicio público de calidad en la programación, y con los derechos laborales.
Desde CCOO no vamos a permitir que los trabajadores, que ya han padecido y padecen la precariedad del sector, ahora tengan que pagar también por la mala gestión empresarial.
Por eso, como primer paso, desde el Sector de Medios de Comunicación de CCOO, bajo el lema EMPLEO DE CALIDAD EN LOS MEDIOS ES INFORMACIÓN DE CALIDAD, vamos a desarrollar el 7 de mayo de 2009, desde sus secciones sindicales y delegados en las empresas de medios de comunicación, una iniciativa estatal de acciones reivindicativas desde los propios medios, que denuncien las situaciones de conflicto y de crisis y sus consecuencias, y que planteen, alto y claro, que los medios de comunicación precisan de todo el apoyo posible para su mantenimiento, viabilidad y para que ofrezcan una información de calidad y plural, y que ante las recetas de más despidos y recortes de derechos nos van a tener en frente, tanto patronales como administraciones.
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