De esta manera, según el estudio, en una escala del uno al cinco, es la información cultural (3,9) la que más se ajusta a la ética profesional, seguida de la información económica y local (3,3 en ambos casos), la deportiva (2,9), la política (2,4) y la crónica y social (2,3)
Para los informadores, os programas del corazón y los de temática rosa son los que más perjudican la imagen del periodista en España. Así lo aseguran un 84,7 por ciento de ellos, según los datos de una encuesta realizada por Demométrica para la APM. En el siguiente puesto se encuentran los reality show y los programas sensacionalistas (39,1%) y las tertulias y los programas basura (37,2).
Con respecto a este tipo de programas, se da la paradoja, de que a pesar de contar con altas audiencias, sus contenidos gozan de poca o ninguna confianza –así lo reconocen el 88,6 por ciento de los encuestados-; y las prácticas poco éticas de los profesionales de la prensa del corazón son señaladas por la mayoría de los encuestados como una de las tres cosas que menos les gustan de los periodistas (46,6%).
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