Arturo Mármol Peris-Mencheta
Arturo Mármol Peris-Mencheta
Arturo Mármol Peris-Mencheta nació en Madrid el 19 de junio de 1936. El cuarto hijo de José e Isabel. Su padre murió cuando él tenía dos años. Sus hermanos Enrique, Isabel y José Luis se educaron en colegios internos para huérfanos de hacienda. Arturo se crió con sus tíos y tías en torno a una empresa familiar de prensa: la Agencia Mencheta. Empresa que siempre estuvo dirigida por miembros de la familia.
Arturo se hizo cargo de la dirección de la empresa en el año 1972, tras el fallecimiento de su primo Juan Peris-Mencheta y Peris-Mencheta. A poco de promulgarse la Ley de Prensa de Fraga, Arturo percibió que la situación de la empresa iba a cambiar por completo: las agencias que tenían contratado servicio con la empresa -Reuters, France Press, United Press y DPA- rescindieron sus contratos, puesto que el servicio confidencial que se les facilitaba ya no tenía razón de ser, al haber esa “relativa” libertad de prensa. Quedaron únicamente periódicos nacionales, todos los de Madrid que en aquellos momentos existían y algunos de provincias, pero las cantidades que abonaban no era suficiente para mantener la empresa.
Arturo se dio cuenta del cambio, y por ello se fue introduciendo en los campos en los que podían presentar algo más de batalla, como eran los toros y los deportes. A los pocos años se retiró del servicio la sección de toros, ya que los periódicos desatendieron esta parcela. La única relación existente con agencias extranjeras, muy al principio de la década de los años 50, fue con France Press; con ella se intercambiaban toros y deportes del extranjero. Esta agencia nos dio el éxito de la liberación de Di Stéfano cuando fue secuestrado en Caracas.
En su despacho de la Agencia Mencheta, cuando era el director
Sin embargo, el servicio deportivo impactó de manera especial en todos los periódicos. La Agencia Mencheta fue de las pioneras en la creación de servicios especiales a la carta en materia de deportes. Fueron los mejores años de la agencia, y llegó a tener en aquellos momentos más de 60 abonados. Unos años después, viendo el gran éxito que había cosechado, surgieron varias agencias que, bajando mucho los precios, arrebataron la primacía en el sector; y, poco a poco, la falta de ingresos suficientes para mantener el negocio familiar motivó el cierre de la empresa el 31 de julio del 2000.
Desde ese momento, Arturo Mármol se jubiló. Había empezado a trabajar desde muy pequeño. Fue un hombre trabajador, amante de su profesión, buen jefe y compañero. Con buen humor, muy refranero y con una chispa de ironía. Fue un hombre bueno, muy amante de su familia, que ha sabido transmitirnos su amor al trabajo, dedicación y entrega en todo lo que se proponía. Guardamos en el corazón muchos momentos familiares en los que hemos agradecido y celebrado la vida.
Alicia Mármol Luengo
6 de marzo de 2022