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La relación entre el poder político y los medios de comunicación es el principal mal del periodismo español

29/09/2011

16:48

Escrito por: APM

Presentación del “Libro negro del periodismo en España”, de Díaz Nosty y coeditado por la APM y la Cátedra UNESCO de Comunicación-Universidad de Málaga.

Las estrechas relaciones entre los periodistas y los políticos es el mayor mal del periodismo en España, según manifestó el catedrático Bernardo Díaz Nosty, autor del “Libro negro del periodismo en España”, que se presentó el 29 de septiembre, coeditado por la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) y la Cátedra UNESCO de Comunicación-Universidad de Málaga, de la que es director el profesor Díaz Nosty.

Para Díaz Nosty es necesario “blindar la información como un elemento de la democracia” que no debe “contaminarse” de mercantilismo ni de otros componentes porque es un derecho ciudadano recogido en el artículo 20 de la Constitución española. Hay que reivindicar la “excepción democrática de la información”, subrayó, porque está ligada a los derechos y libertades públicas.

El “Libro negro del periodismo en España” radiografía un sistema de medios engordado artificialmente mediante las concesiones públicas otorgadas por los sucesivos inquilinos de la Moncloa y de las administraciones autonómicas y municipales, hasta crear una “burbuja mediática”, sin precedentes en Europa, que ahora está pinchando. Esta burbuja es anterior a la crisis económica pero se ha evidenciado con ella. “Aunque no hubiéramos tenido crisis económica”, afirmó Díaz Nosty, “este libro ‘negro’ lo habríamos presentado igualmente”.

Bernardo Díaz Nosty, con el 'Libro negro del periodismo en España'Pero hay todavía, según el libro, una burbuja más: la burbuja académica, que ha creado un gran excedente de titulados universitarios que sobrepasan con mucho la demanda natural del mercado de los medios, de manera que una gran mayoría de ellos se ven obligados a orientarse hacia ocupaciones laborales ajenas al periodismo. Más que a una destrucción de empleo periodístico, que la hay, se está asistiendo a una precarización de las condiciones laborales de los periodistas debido a la sustitución de profesionales experimentados por otros recién titulados y más baratos.

Lucía Méndez, redactora jefa de Opinión del diario “El Mundo”, definió esta radiografía de los medios españoles como de “altísima resolución”, con “muchos datos” y “sin concesiones”. Para Méndez, es necesario hacer una autocrítica “porque la profesión periodística, tal y como la conocemos, ha sufrido casi una mutación genética”, que ha minado la objetividad,  “el respeto a los hechos”. “Ahora”, afirmó, “los medios fabrican sus propios hechos”, y no hacen “sin ningún tipo de complejo”. Nadie se considera responsable de nada: “los periodistas hemos reasignado nuestra responsabilidad individual”, señaló.

“Si en las redacciones hoy hay un periodista que no está dispuesto a escribir lo que le mande el jefe sin más, el periodismo saldrá adelante”, dijo Carmen del Riego, corresponsal política de “La Vanguardia”, quien definió el libro como una “autocrítica” que se tiene que ver como “un intento del periodismo de solucionar sus problemas desde dentro”. Para Del Riego, “el periodismo ha perdido la razón por la que se convirtió en profesión: el sentido de servicio público”, y mientras “no veamos este oficio como un servicio público no empezaremos a salir del pozo”.

Presentación del 'Libro negro del periodismo en España'.Los males del periodismo se centran en varias cuestiones, explicó Manuel Núñez Encabo, presidente de la Comisión de Quejas y Deontología de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), que se abordan en el “Libro negro”. Una de ellas es que estamos asistiendo a una nueva etapa del periodismo, “que es el periodismo sin periodistas”, y la otra se centra en el artículo 20 de la Constitución, cuya garantía “corresponde a periodistas y a empresas editoras”. A los periodistas y a las editoras  les corresponde “garantizar a los ciudadanos su derecho a una información plural, veraz y respetuosa con las libertades”, sostuvo Núñez Encabo, porque “debe quedar claro que las empresas informativas forman parte del periodismo”.

El libro está ilustrado con viñetas de El Roto, presente en el acto junto con casi dos centenares de asistentes, y prologado por Fernando González Urbaneja, presidente de la APM, quien también firma el trabajo “El futuro del periodismo”. Igualmente, se complementa con un artículo del catedrático de Comunicación Miquel de Moragas, titulado “Periodismo: formación desorientada”, y con dos encuestas: una a directores de diarios de información general de pago y otra a estudiantes de disciplinas no relacionadas con Periodismo.

Algunos datos del Libro negro del periodismo en España

Presiones y extorsiones

Una encuesta realizada a comienzos de 2008 entre directores de prensa diaria española de pago, mostró que el 86,5 de los encuestados afirmó haber recibido presiones externas, “siendo las instituciones públicas, en la percepción de los responsables de los diarios, las que mayor intervención habían ejercido sobre los contenidos” (Encuesta en la pág. 105).

“El 54,7% de los entrevistados ‘asume como valor convenido el respeto a los intereses de los anunciantes”(Encuesta en la pág. 105).

“La prensa, desde la mirada de los políticos, acosa y ofrece, a cambio de patrocinios y publicidad, el acompañamiento informativo en su línea editorial”.

“La crisis económica ha acentuado el ofrecimiento, por parte de los medios, de condiciones especiales para las instituciones, que, a diferencia de los anunciantes comerciales, no buscan tanto publicidad bienes y servicios como controlar e influir en los contenidos. Esta publicidad compra espacio de buen trato informativo o, incluso, de silencio antes determinadas circunstancias”.

Caída de la inversión publicitaria

La inversión publicitaria real controlada por Infoadex (tabla 1, pág. 29) ha caído entre 2007 y 2011 con extrema dureza, superando el 30%.  Ha tenido especial incidencia en los medios impresos: en los diarios, el descenso ha sido del 47,8%,y del 45,3% en las revistas. La televisión perdió menos, con un descenso del 34%, “pero el rescate indirecto del Gobierno, mediante la retirada de la publicidad en TVE, ha permitido a las grandes cadenas cerrar el año con fuertes beneficios”. En el caso de la radio, el descenso publicitario ha sido el menor, del 20,9% entre 2007 y 2011.

“La crisis ha aumentado la dependencia de los medios impresos, con cabeceras cuyos ingresos publicitarios procedían, en un porcentaje próximo al 50%, de las instituciones públicas y de las empresas relacionadas con las distintas administraciones”.

“La reducción, por parte de la Administración central, de la inversión en medios (gráfico 2, pág. 29), ha sido progresiva en los últimos cuatro años, con una caída del 70,2% entre 2007 y 2010”, desde los 269,5 millones de euros hasta los 80,8 millones.

“Muchas cabeceras, nacidas al calor de la bonanza, están próximas a desaparecer como consecuencia de los recortes en la publicidad institucional”. Entre 2007, con 461,2 millones de euros de publicidad institucional, y 2010, con 235,6 millones, “se advierte una brusca caída próxima al 50%, que tiene una incidencia real sobre la supervivencia de la prensa” (Gráfico 1, pág. 28).

“En 2007, último año de bonanza, en la mayoría de las comunidades autónomas el Gobierno regional fue el máximo contribuyente publicitario” (Tabla 2, pág. 31).
“Asimismo, ha caído el componente municipal de la inversión, otra de las fuentes e ingresos de los minifundios mediáticos”  (Tabla 3, pág. 31).

Realidad bipolar y credibilidad

“La polarización política ha trasladado al seno de los medios tensiones y prácticas partidistas que alteran su función social, les restan credibilidad y desatienden el derecho a la información verificada. Esa dinámica, infrecuente en otras naciones europeas, con excepción de Italia, ha alentado la discrecionalidad gubernamental en la concesión de licencias, el manejo de la publicidad institucional y otros intercambios”.

“El periodismo español, que tuvo un valor relevante en la socialización de los valores plurales de la democracia tras el final del franquismo, derivó su fuerte componente político de un periodo de cambio y acceso a la libertad a una politización intensiva. Y esta se fue transformando, por degradación y clientelismo, en polarización, en visión bipolar de la realidad”.

“La credibilidad, desde la percepción del conjunto de la opinión pública, se debilita en la medida en que la clase política va reduciendo su discurso a los 70 caracteres del titular de la noticia, con la banalización del debate y la apropiación de la cancha mediática afín como frente de combate”.

“La mediatización de la política, que sigue a la politización de los medios, vincula la credibilidad de medios y políticos ante la opinión pública. El descrédito de la política va unido al de los medios

Incremento de capital externo en la propiedad de los medios

“La expansión del sistema español [de medios], en buena medida impulsada por el juego político, no solo ha derivado en la creación de una burbuja mediática, sino que lo ha hecho insostenible y ha facilitado su progresiva adquisición, a buen precio, por parte de intereses foráneos, con un reforzamiento significativo de la presencia italiana”

Evolución entre 2007 y 2011 del capital de los cuatro grandes grupos “propietarios de un grupo central de medios informativos en España, de los que dependen buena parte de los contenidos que nutren a la opinión pública”: Ver gráfico 3 de la pág. 38.

“Bajo el paraguas comercial de los cuatro grupos –Prisa, Unidad Editorial, Mediaset y Planeta- circula más del 70% de la difusión de la prensa de referencia nacional –El País, El Mundo y La Razón-, el 70% de la prensa deportiva –Marca y As-, más del 80% de la económica –Expansión y Cinco Días-, el 80% de la audiencia de la televisión comercial –Antena 3, Telecinco, Cuatro, numerosos canales de TDT, Digital+, etcétera- y sobrepasa el 70% de la radio comercial generalista –Cadena SER y Onda Cero.”

La burbuja académica

“Un factor distintivo de la crisis de los medios en España es el de la presión sobre el empleo de un sistema formativo excesivamente amplio, cuyos efectos han acentuado, en los últimos años, la precarización laboral”.

“La apertura de nuevos centros universitarios, que no ha cesado en los años de crisis, hace insostenible, en términos de rentabilidad social, el desfase entre titulados y ocupación laboral afín a la formación, que agrava un problema estructural surgido hace más de 20 años”.

“El número de titulados en Periodismo generado por el sistema educativo desde mediados de los años setenta del siglo pasado se acercaba, en julio de 2011, a los 75.000. Si a ello se suman los licenciados en Comunicación Audiovisual, que compiten en el mercado de trabajo del sector, la cifra se dispara a más de 3.000 egresados anuales, cuando la demanda natural –sustituciones por jubilación- no alcanza los 600 puestos de trabajo al año”.
“Si la reducción de puestos de trabajo periodístico afecta al producto informativo, la mayor incidencia sobre su calidad  hay que buscarla en la sustitución de profesionales experimentados por becarios y jóvenes licenciados, con una incidencia en la aplicación salarial que llega a suponer el ahorro de hasta un 75% por puesto de trabajo”.

“Los nuevos licenciados se integran en las redacciones con remuneraciones que suelen ser entre dos y tres veces inferiores a las que se dan, a igual trabajo y dedicación, en los países centrales de Europa”.

Precarización y paro

“…el desempleo no ha alcanzado cifras tan elevadas como las que se han dado frecuentemente, ya que en ellas se hace referencia a los puestos de trabajo en los medios, y no exactamente a los de los periodistas”.

“…el aspecto más grave de la crisis, en el ámbito específico profesional, ha sido la precarización, mediante la sustitución de contratos de periodistas experimentados por otros de carácter temporal y baratos suscritos con jóvenes. Más que una lógica de relevo generacional, se asiste a un empobrecimiento del capital humano”.

Una cifra “ajustada a la industria de los medios gira en torno a los 82.000 empleos. De este total se puede estimar que entre un 25% y un 30% son puestos ocupados por periodistas, esto es, entre 20.500 y 24.600”.

El sector está fuertemente concentrado “en torno a Madrid (36.140 trabajadores) y Barcelona (19.605), que reúnen el 57,6% nacional, a gran distancia del resto de las provincias con más actividad” (Tabla 5, págs. 66 y 67).

“En Madrid, con el 37,3% del empleo nacional, se concentra el 26,1% del paro tota total; en Barcelona, con el 20,3% de la actividad, el 16,1%” (Tabla 5, págs. 66 y 67).

“En términos relativos, las comunidades con menor desempleo, por debajo del 10%, son: Madrid (7,4), País Vasco (7,5), Cataluña (8,8), Aragón (9,2), Navarra (9,3) y Galicia (9,4). En el otro extremo de la tabla, por encima del 15%: Andalucía (20,5), Canarias (20,4), Murcia (16,5) y Comunidad Valenciana (15,8)”( Tabla 5, págs. 66 y 67).

“… no se debe confundir el paro de los periodistas con el desempleo de los licenciados. Las estadísticas que constatan la situación de los titulados revelan que la mayoría de los que estudiaron Periodismo trabaja fuera del sector de los medios, y que titulados en otras especialidades lo hacen como periodistas”.

“En la tabla 6 [pág. 68] se analiza el mercado de trabajo de los licenciados en Periodismo, que se mantienen, con ligeras oscilaciones, en torno a los 6.200 parados en 2011, con un crecimiento anual próximo al 5%”.

“El grado de ocupación laboral de los licenciados en Periodismo, en trabajos relacionados con su especialización, se sitúa ya por debajo del 20% en las estadísticas de empleo”.
“El grado de correspondencia titulación-empleo ha caído significativamente en los últimos dos años, reduciéndose prácticamente a la mitad” (Gráfico 4, pág. 64).

“En la visión macro del sector (tabla 5, págs. 66 y 67), el paro entre los afiliados a la Seguridad Social, esto es, con un contrato anterior, alcanza el 10,6%, muy por debajo del total nacional”.

Una proyección conservadora, “permite hacer una estimación que eleva la destrucción de empleo sectorial a unos 4.800 trabajadores en el periodo 2008-2011, de los que en torno al 35% -unos 1.700- correspondería a periodistas”.

El libro se puede adquirir en librerías especializadas o en la sede de la APM (donde los asociados y preasociados gozan de un descuento). También a través de [email protected]  (sin cargo por gastos de envío)


'LIBRO NEGRO DEL PERIODISMO EN ESPAÑA'

Autor: Bernardo Díaz Nosty
Edición: Septiembre 2011
Páginas: 109
Precio: 15 euros/ asociados y preasociados: 10 euros
ISBN: 978-84-87641-47-3
Coeditado por la APM y la Cátedra UNESCO de Comunicación-Universidad de Málaga.

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